Morena sorpresa

Los Reyes Magos se han portado excepcionalmente bien conmigo.

Había quedado para comer con un amigo que hacía mucho tiempo que no veía. Ya iba camino al restaurante cuando me ha llamado para decirme que al final no podía ir a comer conmigo, pero he decidido ir igualmente. Me gusta La Gloria de la Montera.

Como siempre, mogollón de guiris. Había cola y decido quedarme esperando allí, a pesar del frío y la humedad. Por suerte en ese momento no llovía. Y por más suerte todavía, ha llegado una morena más o menos de mi edad, algo más baja que yo. Una chica muy normal, pero que parecía simpática. No llevaba perfume pero olía bien, lo sentía.

Se supone que cuando estás en una cola miras p'alante impaciente, pero yo estaba mirando para atrás continuamente, esa tía me estaba atrayendo un montón.

- Hola. Perdona que te lo pregunte, pero no paro de darle vueltas... Creo que te conozco de algo, ¿de dónde eres? - Le dije.
- No sé, creo que te equivocas.
- ¿Eres de Segovia?
- No, soy de Ávila.
- ¿Seguro que eres de Ávila?
Me miró con cara de "eres idiota" (¿por qué serán tan simpáticas las mujeres?) y luego miró detrás mío:
- Puedes avanzar.
- Gracias - Avanzando. Faltaba poco para entrar.

- ¿Eres actriz? A lo mejor es eso...
- No soy actriz.
- Pues me suenas un montón... Da igual. Un amigo me ha plantado. ¿Vienes sola?

Silencio incómodo. Sentía que tenía ganas de largarse. Ha mirado mi mano derecha y ha visto mi anillo.

- Oye, no muerdo. Para comer los dos solos, ¿por qué no hablamos un rato? No puede ser tan malo, los viejos hablan continuamente con desconocidos y no parecen pasárselo tan mal. - No se me ha ocurrido nada mejor. Al final ha caído.

Al quitarse el abrigo para sentarnos ha puesto al descubierto unas tremendas tetas, no me esperaba semejantes buenas tetas en esa chica. Ya no era una chica tan normalita... Me empezaba a atraer...

Hemos estado comiendo, hablando y riendo dos horas y media. C tiene casi la misma edad que yo, pareja desde hace más de una década, trabaja en cosas parecidas a las mías, hablábamos el mismo idioma, y cada vez que destapaba su sonrisa, su cara era como un baño de luz y agua fresca.

Este tipo de estupideces no son normales en mí. No me voy a colar por esta pava, me la follaría una y mil veces, pero cada uno tiene que seguir su camino. En la comida me he empalmado dos veces, la primera bien dolorosa, tenía la polla mal colocada y ha sido algo complicado acomodarla. Diría que se ha dado cuenta, y diría también que ha disimulado. Me imaginaba a C en pelotas cabalgándome, con sus tetas en mi cara y su cara iluminándose de placer.

Hemos intercambiado mails. Ahora C tiene el mail que uso para camuflarme y escribir en este blog. Es la enésima vez que me preguntan por qué ese mail tan raro. Si me busca en google va a flipar... Ella también me ha dado un mail "raro".

Le he dicho a dónde saldré mañana por la noche con el amigo que me ha dado plantón, ella dice que no saldrá. Le voy a escribir un mail.